La sucesión de Fibonacci y la Basílica de San Lorenzo.

He de decir que está siendo una difícil búsqueda, aunque tal vez es lo más obvio del mundo.

He iniciado mi investigación intentando encontrar una página que hiciese referencia de forma de directa a la secuencia de Fibonacci y a la Basílica de San Lorenzo, ambas en la misma fuente de información, pero nada ha resultado.

Durante mi viaje he encontrado una página que hablaba de las medidas del edificio, que poco me ha solucionado, o eso creo. 

He empezado a buscar entonces información sobre Fibonacci, por ver si esa búsqueda me era más fructífera. Y he descubierto que el resultado de dividir cualquiera de los números de la sucesión de Fibonacci entre su antecesor (por ejemplo, siendo la fórmula de Fibonacci  0,1,1,2,3,5,8,13…  5/3= 1.666 ; 13/8=1.625), son números muy aproximados al número Phi, el número áureo, (proveniente de Fidias), que es 1.6180339887...
Esto me hace pensar que tal vez se quisiera aproximar a la perfección y armonia que tenian los edificios que usaban el número Phi, como el Partenón.

En la Capilla Pazzi, Brunelleschi también usó la proporción áurea y la serie de Fibonacci, por lo que se deduce que usaba estas secuencias en varias de sus edificaciones.

En Pisa existe una arquitectura, la iglesia de San Nicolás, que en su fachada presenta la sucesión de Fibonacci. De una página he podido extraer esto: "La incrustación está hecha en un ábaco para representar números irracionales como la Proporción Áurea (...) Se trata, por tanto, de un importante monumento cuya presencia había sido diseñada para la educación de las élites, de acuerdo con el programa de la filosofía escolástica: un precioso don de la sabiduría de los antiguos, descubierto después de ochocientos años de olvido y cuya presencia debe ser valorada".

También se podría considerar esta proporción como un ejemplo adicional de la divina disposición matemática de la creación por parte de Dios. He visto a lo que se le nombra "el ojo de Dios" en la espiral, pero no he descubierto nada, por desgracia, sobre ello, simplemente deducir que podría tener un componente simbólico y divino, puesto que se podría relacionar la perfección de la secuencia de Fibonacci con la perfección de Dios al llevar a cabo la creación (entre cuyas creaciones también se encontraría la secuencia). 

No sé si pedías esto Manuel, pero ha sido una investigación divertida.